Y nunca voy a poder explicar lo que me pasa por la cabeza cuando te miro. Y aunque pudiera explicarlo, no te lo diría jamás. Prefiero mirarte y que me mires a los ojos y que todo quede ahí. Porque yo sé que aunque no hablemos, cuando nos miramos y nos damos esos besitos chiquitos y tocamos nuestra naricitas, los dos sabemos muy bien lo que sentimos, lo que queremos y lo que pensamos. Me encanta. Es genial. Es perfecto todo esto. Me encanta como hablamos con las miradas, con las caricias. Amo mirarte y que me sonrías así, que me pongas esa carita de "estoy acá Florcita, te amo y estoy para cuidarte", y esa mirada y esa carita me hacen sentir que sos mío. Que te tengo y no te tengo que dejar ir nunca. Y ahí estas vos, y ahí estoy yo. Y me tenés, y soy tuya. Y como sé que no quiero otro que no seas vos, y aunque quisiera, jamás podría encontrar, prometo cuidarte para siempre, o mejor dicho "pa siempe" como diríamos nosotros (L) .